WhatsApp es la principal plataforma de mensajería instantánea que se utiliza para chatear, compartir fotos y vídeos, enviar documentos, etc.
La aplicación es utilizada por miles de millones de personas en todo el mundo. Y la razón por la que cuenta con una base de usuarios tan grande es que se puede confiar ciegamente en WhatsApp cuando se trata de privacidad.
Pero, ¿podemos confiar en las personas que usan WhatsApp, igual que confiamos en WhatsApp? Obviamente no. Y es por esta misma razón que muchos padres se sienten bastante incómodos al permitir que sus hijos usen WhatsApp.