Habitualmente, instalar la WiFi en una zona amplia requería bastante sofisticación. Hacerlo de forma económica a menudo implicaba utilizar enrutadores baratos para evitar el elevado coste de puntos de acceso específicos (PAs). Esta situación ha cambiado radicalmente, con decenas de compañías que ahora ofrecen algún tipo de sistema de red en malla que ofrece acceso inalámbrico “plug and play”adecuado para casas más grandes y pequeñas oficinas.
¿Por qué red en malla?
Cuando funciona bien, tener una malla de puntos de acceso WiFi ofrece un sistema fácil de administrar con perfecta cobertura y transiciones rápidas de un PA a otro a medida que los dispositivos se desplazan. Además, algunos sistemas de red en malla solo necesitan un nodo cableado, ya que los demás se comunican entre ellos de forma inalámbrica. Sin una red en malla, o al menos una plataforma de administración común, tendrías que ajustar los parámetros individualmente en cada PA y además, normalmente, conectarlos a la red de cable o instalar algunos como repetidores.
La malla frente a la solución de extensión tradicional
Si estás empezando desde cero, la única razón para no implementar una solución en malla es tener bajo presupuesto. Los distribuidores siguen cobrando un sobrecargo por las soluciones en malla, pero la explosión de competencia está cambiando la situación muy rápido. Son más fáciles de implementar y de mantener que un sistema de router y extensores ad hoc y además, al estar creados a medida para esta aplicación, normalmente ofrecen mejor rendimiento. Como todos los dispositivos se comunican, también pueden localizar los canales de forma automática en base al uso, al ruido y para minimizar las interferencias entre ellos.
Diseñar la red en malla
Una vez que ya tienes la idea del área que quieres cubrir, es necesario hacer algo de análisis. Evalúa dónde sería posible colocar PAs cableados, y piensa en qué lugares serían adecuados modelos pequeños y estilosos y cuáles podrían soportar versiones de aspecto más industrial. Recuerda que vas a necesitar electricidad en cualquier lugar donde pongas un PA. Esta planificación adelantada te ayudará a limitar las opciones. Si necesitas cobertura en el exterior del edificio en una zona extensa, quizás también quieras aprovechar un sistema que incluya un modelo resistente a la intemperie.
Si tienes conexión Ethernet por cable hasta los lugares donde quieres colocar PAs, tal vez quieras elegir un sistema como Google Wifi, que ofrece la opción de “backhaul” (la conexión entre los puntos de acceso y el enrutador) con cable. Algunas líneas de producto como Ubiquiti requieren conexiones con cable, mientras que la marca de consumidor de la misma compañía, Amplifi, se puede configurar tanto para cable como inalámbrica, dependiendo de las unidades específicas que elijas. Una función que me gusta mucho de la solución de Google es que, incluso si conectas tus PA de forma inalámbrica, se pueden enchufar dispositivos con cable en uno o en los dos puertos Ethernet de cada unidad.
Si no tienes cable que puedas aprovechar, vas a necesitar un sistema inalámbrico por satélite. Algunos ejemplos de esto son el poderoso Netgear Orbi o Linksys Velop, o discos más pequeños de compañías como Plume, Luma, o Eero. Todos estos sistemas funcionan bien, aunque se necesitan más discos pequeños que PA grandes como Google o Netgear (pero suelen ser más baratos).
¿Red en malla o núcleo de Hogar Inteligente?
No conformes con mantenerse solo con núcleos de red simples, las empresas han empezado a añadir funcionalidades de Hogar Inteligente a sus soluciones de red en malla. El router Connect Home de Samsung soporta tanto red en malla como tecnología IoT SmartThings. Efectivamente, si quieres implementar tecnología de Hogar Inteligente, combinar ambas es una forma rentable de empezar, pero eso significa que tendrás que quedarte con el mismo distribuidor para ambos sistemas.
Nube o no Nube
Muchas de las soluciones más novedosas dependen en gran medida de la nube. Esto puede estar bien para hacer actualizaciones automáticas. Pero significa que puedes ser susceptible a cortes causados por problemas del servidor, y que la información sobre tu hogar se está enviando quién sabe a dónde. Gooogle, por ejemplo, no guarda en secreto el hecho de que extrae información de los dispositivos de sus consumidores. Otras soluciones como la línea principal de producto de Ubiquiti se gestionan in situ, y funcionan felizmente sin acceso a internet.
Los sistemas tradicionales como Ubiquiti ofrecen una consola de gestión de red habitual, a la que puedes acceder a través de una interfaz del navegador. Ubiquiti une a esto incluso un adaptador USB que puede controlar la gestión de la red sin tener que dejar el aparato en marcha. Sin embargo, estas interfaces pueden ser un poco abrumadoras para aquellos que no están familiarizados con la terminología de red. Así que la mayoría de la oferta para consumidor más nueva incluye la gestión desde una aplicación de móvil con una interfaz de usuario simplificada.
Ejemplo de instalación: Netgear Orbi
En nuestro artículo anterior sobre extensión de WiFi en el hogar, incluí la instalación de un par de unidades Netgear Orbi. Quizás la parte más compleja de la instalación era el hecho de que las instrucciones de red de malla por defecto asumen que la primera unidad que instalas también va a ser tu enrutador primario, y necesitas acceso a la nube para empezar. En nuestro caso, tenemos un enrutador de respaldo y un firewall situado entre nosotros y todo lo demás, así que las unidades Orbi tenían que ser instaladas solo como puntos de acceso. No era difícil, pero si estás en la misma situación, estate preparado para tener que buscar un poco más las opciones de instalación personalizadas o avanzadas, en lugar de asumir que vas a pasar sencillamente una instalación wizard.
Si tienes una combinación de router y módem de tu proveedor de servicios de internet, estarás en una situación similar en la que configurarás tus nuevas unidades en malla solamente como puntos de acceso y dependerás de tu unidad ya existente para enrutar.
Orbi ofrece una sencilla luz de color para indicar si el enlace y la obtención de señal del satélite desde la unidad principal ha tenido éxito. Dado que estas unidades son tan potentes, hay mucha flexibilidad para ubicarlas. He descubierto que puedo tener el satélite en un piso diferente y a varias habitaciones de distancia, y aún así el sistema funciona bien.
Si estás usando uno de los dispositivos como enrutador, por supuesto vas a necesitar la información que tu proveedor de internet te ha dado, al igual que con cualquier otro router. Aparte de esto, simplemente escoge un SSID (ID de red) con el que quieres que la gente se conecte, y listo. Muchos sistemas también ofrecen la opción de red de invitado, pero las que he probado parecen ser o bien muy limitadas, o poco seguras, así que no suelo usarlas.
Cuando el primer dispositivo está instalado, normalmente solo necesitas conectar los dispositivos adicionales y estos localizarán la unidad principal siempre que estén lo suficientemente cerca. En algunos casos esto requiere pulsar algún botón, y en otros es completamente automático. Hablando de armarios de cableado, recuerda que tu enrutador principal normalmente se ubicará allí donde el servicio de internet entra en la casa – ya que quieres tener su capacidad cortafuegos por fuera de los conmutadores que estés usando – lo que puede no ser buena idea en cuestión de cobertura, y llevarte a necesitar un dispositivo adicional.
Para los manitas, podéis construir vuestra propia red
El popular software de código abierto DD-WRT contiene una implementación de WDS (Sistema de Distribución Inalámbrica, en inglés Wireless Distribution System) que se puede usar para crear tu propia malla de dispositivos válidos como PA. Sin embargo, viene con la gran advertencia de que puede que no funcione si no todos los dispositivos están usando el mismo chipset. Así que no es tan sencillo como sacar todos tus PA y enrutadores antiguos del armario y desplegarlos por la casa.
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